En el marco de las actividades asociadas a nuestro rol gremial y veedor respectivamente, y como ciudadanos de Manizales, desde la Sociedad Caldense de Ingenieros y Arquitectos, la iniciativa del Centro de Observación para la Infraestructura de Caldas, y la Corporación Cívica de Caldas, hacemos un seguimiento constante a las obras de infraestructura contratadas y en ejecución por parte de la administración municipal. Es así como mediante esta comunicación expresamos nuevamente nuestras preocupaciones y peticiones frente a los proyectos de la capital caldense, para que sean atendidas por los responsables y sean del conocimiento de la comunidad en general.
Teniendo en cuenta el contexto actual de Manizales, en el que nos enfrentamos a grandes traumatismos por la falta de planeación y deficiente ejecución de obras como el Intercambiador Los Cedros, el bulevar de la Calle 48 o la PTAR Los Cámbulos, y la desconfianza que esta situación ha generado en cuanto a la correcta ejecución de obras que están por iniciar como la Línea Tres del Cable Aéreo (ubicación de las estaciones, gestión predial, tiempos de duración, endeudamiento, afectación a la movilidad) o en proceso de gestión como el Sistema Integrado de Transporte y Campus Manizales, consideramos que la administración municipal actual debe abstenerse de iniciar nuevos contratos de infraestructura y enfocarse en dar solución a los problemas que presentan las obras en ejecución.
En diciembre de 2022 inició el contrato para la construcción de un nuevo bulevar en la Calle 19, cuya duración es de 10 meses y su inversión es de aproximadamente $8.100 millones de pesos (obra e interventoría), en un momento en que la ciudad:
Tiene otras prioridades por atender en el frente de infraestructura.
Sigue a la espera de la culminación de la Calle 48.
Tiene pico y placa sustentado en las obras del Intercambiador Los Cedros, que a su vez tampoco muestran un avance significativo y generan represamiento del tráfico.
Está ejecutando obras de la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales, que iniciaron en abril de 2022 y a la fecha no tienen una ejecución superior al 5%.
Se enfrenta a una alta incertidumbre en cuanto a los riesgos que implica construir una nueva línea de Cable Aéreo, con los antecedentes de los proyectos que se están realizando sin la debida planeación.
Por último, recordamos que en los múltiples espacios que hemos tenido con la administración y en diferentes medios de comunicación, hemos alertado desde una mirada técnica sobre las problemáticas que a hoy se están generando, y los hechos no demuestran acciones contundentes para solucionarlas. Entonces, ¿quién asumirá la responsabilidad de lo que está ocurriendo en Manizales? ¿De los sobrecostos? ¿Del endeudamiento? ¿De la inadecuada planeación? ¿De la afectación a la calidad de vida y a la economía? ¿Y de la confianza que los ciudadanos depositan en los gobernantes?
Lee AQUÍ la nota que publicó el periódico La Patria al respecto.